El día 4 de febrero se celebra el Día Mundial Contra el Cáncer, una de las enfermedades más frecuente entre la población. Los tratamientos del cáncer y de la propia enfermedad provocan al paciente numerosos efectos secundarios, tanto a nivel físico como emocional. Por ello, el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Castilla-La Mancha (COFICAM), destaca el importante papel que juega la Fisioterapia en la recuperación de los pacientes con cáncer. COFICAM apoya la intervención multidisciplinar y así ayudar a mantener una buena calidad de vida, durante y después de los tratamientos.
El objetivo de la Fisioterapia oncológica es ayudar tanto antes de la intervención, como durante el tratamiento de recuperación y durante la vida después del cáncer. Resulta tanto más más eficaz cuanto más temprana sea la intervención.
¿Cuáles son los cánceres más frecuentes?
Según datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) se diagnostican más de 250.000 caso al año. Los más frecuentes son:
- Colon y recto: 44.937 casos
- Próstata: 34.394 casos
- Mama: 32.536 casos
- Pulmón: 29.503 casos
- Vejiga: 23.819 casos
La Fisioterapia ayuda a retomar la vida cotidiana
Retomar la vida cotidiana después de los tratamientos no es tarea sencilla. En este sentido, numerosos estudios confirman que la Fisioterapia ayuda en el proceso de recuperación tras una operación. Y evita posibles complicaciones tras la cirugía, como es la perdida de movilidad, tratamiento de cicatrices retractiles, fibrosis, y el cansancio o dolores varios. “La Fisioterapia, tiene un papel muy importante en los problemas relacionados con la cirugía, radioterapia y quimioterapia tales como: limitación articular, contracturas o adherencias.
Según datos de la Sociedad Española de Oncología Médica se diagnostican más de 250.000 casos de cáncer al año
Las técnicas aplicadas, en función del tipo de cáncer y de sus síntomas, ayudan a la recuperación y al tratamiento de las secuelas de los diversos tumores. Entre éstos se encuentran los trastornos motores y neurológicos, las dificultades respiratorias, el dolor, la pérdida de coordinación estática y dinámica, las dificultades en el equilibrio y la propiocepción. Sin olvidarnos de las dificultades en la marcha y la deambulación autónoma”, afirman desde COFICAM.
La importancia del Ejercicio terapéutico
Además, los expertos señalan el beneficio tanto a nivel físico como emocional del Ejercicio Terapéutico. Siempre bajo la supervisión del fisioterapeuta, se convierte en una herramienta imprescindible en la recuperación de un proceso oncológico.
Este ejercicio, en una fase inicial, debe ser individual y adaptado a las necesidades y grado de tolerancia al mismo que tenga el paciente afectado.
“Desde COFICAM también queremos concienciar sobre la importancia de conocer las técnicas de autoexploración, como por ejemplo en un tumor de mama, las revisiones periódicas y la realización de las pruebas preventivas. Son fundamentales para poder detectar a tiempo esta enfermedad. El diagnóstico precoz es vital para las posibilidades de curación, que en algunos casos pueden ser del 100% si se detecta a tiempo”, concluyen.