La crisis provocada por la COVID-19 ha agravado la fragilidad social y sanitaria de las personas con cáncer y sus familias. Casi 280.000 personas se diagnostican con esta enfermedad en nuestro país cada año. Por eso COFICAM adquiere un compromiso con la AECC para atender las necesidades de los pacientes con cáncer.
Compromiso de COFICAM con la AECC
El 4 de febrero se conmemora el Día Mundial de la lucha contra el Cáncer. Se estima que esta enfermedad afecta a 1,5 millones de personas en España. Cada año, casi a 280.000 personas se las diagnostica cáncer en nuestro país. Y más de 120.000 fallecen (una media de casi 307 personas cada día). Por ello, con motivo del día de esta enfermedad, el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Castilla-La Mancha (COFICAM) manifiesta su compromiso con la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). Queremos responder y hacer frente a las necesidades de los pacientes, paliando el impacto de la pandemia en sus vidas.
El cáncer se ha erigido en las últimas décadas como el principal problema sociosanitario a nivel mundial. Es la segunda causa de muerte en todo el mundo y se proyecta un crecimiento de más del 30% de nuevos casos para el 2030. Actualmente, en nuestro país, 1 de cada 2 hombres 1 de cada 3 mujeres padecerán cáncer a lo largo de su vida.
La Fisioterapia aplicada a los pacientes con cáncer es una herramienta imprescindible para intentar disminuir los efectos secundarios de esta enfermedad
Impacto de la COVID-19 en los pacientes
La crisis provocada por la COVID-19 ha agravado la fragilidad social y sanitaria de las personas con cáncer y sus familias. Se trata de un colectivo doblemente vulnerable, por el cáncer y por el virus. Por un lado sufren el impacto sanitario: retraso en las pruebas diagnósticas, tratamientos demorados o la incertidumbre y necesidad de información que ayude a reducir el miedo al contagio. Y por otro lado sufren el impacto emocional y social: soledad no deseada, ansiedad por retrasos en tratamientos, miedo al contagio, sufrimiento ante las dificultades para acompañar y ser acompañados en el proceso de final de la vida y por el agravamiento de las dificultades económicas y laborales.
La Fisioterapia aplicada a los pacientes con cáncer es una herramienta imprescindible para intentar disminuir los efectos secundarios de esta enfermedad
El papel de la Fisioterapia oncológica
La Fisioterapia aplicada a los pacientes con cáncer es una herramienta imprescindible para intentar disminuir los efectos secundarios de esta enfermedad. Su objetivo principal es ayudar tanto antes de la intervención, como en el tratamiento de recuperación. Y continuar así durante la vida del paciente después del cáncer, siendo más eficaz cuanto más temprana sea la intervención. “La Fisioterapia juega un papel muy importante en la recuperación de los pacientes. Forma parte de la intervención multidisciplinar y ayuda a mantener una buena calidad de vida, durante y después de los tratamientos”, afirman desde COFICAM.
Las técnicas que se aplican varían en función del tipo de cáncer y de sus síntomas. Así ayudamos a la recuperación y al tratamiento de las secuelas de los diversos tumores. Por ejemplo, los trastornos motores y neurológicos, las dificultades respiratorias, el dolor o la pérdida de coordinación estática y dinámica. Y también las dificultades en el equilibrio y la propiocepción, así como las dificultades en la marcha y la deambulación autónoma.
Por último, COFICAM quiere reconocer el esfuerzo de todas las asociaciones y entidades que están acompañando a las personas afectadas por el cáncer. Su compromiso y labor continuada así lo merece. Además, queremos subrayar la importancia de seguir apoyando la investigación del cáncer como instrumento imprescindible en la lucha contra esta enfermedad.