Javier Aceituno trabaja como fisioterapeuta del Hospital General Universitario Nuestra Señora del Prado de Talavera de la Reina desde junio de 2008 y es autor de varios artículos. Se ha doctorado cum laude con su Tesis Doctoral sobre el uso del láser de alta potencia en procesos de rehabilitación del síndrome subacromial.
¿Por qué decidiste ese tema para hacer la tesis?
La patología de hombro es muy común en el hospital donde trabajo, siendo el dolor el síntoma más importante para el paciente. El láser de alta potencia es una terapia actual en la que en los últimos años se están desarrollando líneas de investigación que fijan su efectividad en distintas patologías. Ante la posibilidad de contar con este equipo en nuestro centro decidimos estudiar su eficacia en el síndrome subacromial, puesto que era necesario hacer su comparación con placebo.
Lo importante es el proyecto llevado a cabo y las personas que han colaborado a lo largo de este camino, compañeros de trabajo, directores de tesis, grupo de investigación en fisioterapia de Toledo. Es necesario que los fisioterapeutas investiguemos, para poder tener datos sólidos que avalen nuestros planteamientos que nos sirvan en el diálogo con otros profesionales sanitarios.
¿Cuántos años de investigación han sido?
Desde que se realizó el proyecto hasta que ha sido defendida la tesis han pasado tres años.
¿Qué aplicaciones prácticas puede tener esta investigación?
La patología del hombro tiene una gran prevalencia, a la que nos enfrentamos diariamente.
A pesar de no obtener resultados significativos entre los grupos de tratamiento, nos muestra que la intervención fisioterápica propuesta es efectiva. La mejoría se mantiene al menos 3 meses después del tratamiento. También señala tendencias de mejora en el largo plazo del grupo que recibió el láser que deben ser objeto de futuras investigaciones.
¿Qué te ha aportado a nivel profesional y personal pasar estos años elaborando la tesis?
Es un camino complicado en el que tienes que conjugar trabajo, familia, tiempo libre y tesis. La suerte es que conté con unos colaboradores estupendos y que pude realizar la investigación como parte de mi trabajo. Pero indudablemente resta tiempo que espero saber recompensar especialmente a mi mujer e hijas.
¿Animarías a los fisioterapeutas licenciados a realizar la tesis doctoral? ¿Qué consejos les darías?
Por supuesto, es una experiencia enriquecedora de crecimiento personal y profesional. La investigación ya sea parte de una tesis o no, es una labor que debemos desarrollar para crear evidencia, por el bien de la profesión y como no de nuestros pacientes. A los que se planteen hacer la tesis les diría que paciencia, tener las ideas claras y perseverar a pesar de las dificultades. Y considerarlo sobre todo como una carrera de fondo, a largo plazo.