Deseamos desde COFICAM que en el 2021 la normalidad se recupere ya que el año 2020 no ha sido un año al uso. Desde que llegó la pandemia el mundo se detuvo y cualquier actividad que estuviésemos realizando hasta ese momento quedó en un segundo plano. Un nuevo virus estaba provocando miles de pérdidas humanas y un colapso sanitario sin precedentes.
Lo más importante es la salud
Todo ello nos hizo darnos cuenta de que nada es tan importante como parece cuando no tenemos salud. En ese momento, cuando sobrevivir se convierte en la prioridad es cuando todos arrimamos el hombro y damos lo mejor de nosotros mismos para salir adelante.
En este convulso contexto, los fisioterapeutas quisimos aportar todos nuestros recursos. Desde COFICAM recomendamos en su día la suspensión de la actividad programada de fisioterapia de carácter no urgente en cualquier ámbito asistencial debido a la COVID-19. Una decisión tomada con la intención de que la población castellanomanchega recibiera los tratamientos fisioterápicos con plenas garantías de seguridad. Atendiendo a la necesidad primaria de revertir la curva de contagio, que era la prioridad en esos momentos.
El cierre de todos los centros y unidades de Fisioterapia fue la decisión más adecuada
Teniendo en cuenta la necesidad de control de la epidemia, el cierre de todos los centros y unidades de Fisioterapia de toda la Comunidad fue la decisión más adecuada. Ya que no disponían del material de protección adecuado, como mascarillas, que evitase el contagio entre el fisioterapeuta y el paciente.
Además, el Colegio puso a disposición de las autoridades durante ese periodo excepcional a sus profesionales, centros y establecimientos de Fisioterapia. Todos los profesionales sanitarios estuvieron disponibles para ser llamados en cualquier momento de acuerdo con las necesidades de la crisis sanitaria.
Triaje, control telefónico o UCI son algunas de las distintas tareas que hemos desarrollado los fisioterapeutas. Una figura erigida como fundamental en la recuperación de los pacientes que han sufrido la enfermedad. 2020 se acaba mucho peor de lo que lo empezamos pero con la esperanza de que en el 2021 todo volverá a la “normalidad”.
