Sofía Rodríguez Uribe es fisioterapeuta, y lleva 30 años trabajando en centros educativos. Tiene clara la importancia de la Fisioterapia en la escuela. “La inclusión del fisioterapeuta en el equipo de profesionales docente es fundamental. Si no formamos parte de esos equipos no hay forma de llevar a cabo nuestro trabajo con eficacia”, afirma Sofía. Gracias a su trabajo, ha conseguido que el equipo docente y las familias conozcan el valor del trabajo con los niños en las escuelas. “Es algo que hemos conseguido recientemente, y que celebramos”.
Sofía Rodríguez y Ana María Rolania son las autoras del libro “Fisioterapia en la Escuela”. Con él han destacado la importancia de la atención fisioterapéutica que necesitan los niños con discapacidad motriz la reciban en la escuela. Solo así es posible trabajar sobre los efectos que el trastorno motor puede generar en el proceso de aprendizaje del alumno. Y esto solo es posible desde la “inclusión” del fisioterapeuta en el equipo de profesionales docentes y de orientación educativa. Se ha de seguir un modelo de funcionamiento interdisciplinar que trabaja a través de objetivos de equipo funcionales y de participación.
“En el momento actual queremos ir más allá de los primeros equipos multidisciplinares, donde los resultados eran la suma de lo que cada profesional hacía en su parcela. Estamos en el momento del trabajo inter/transdisciplinar, donde el resultado final tiene que ser más que la suma de las partes”, concluye Rodríguez Uribe.
Actualmente el modelo de intervención funcional y de participación está centrado en el entorno natural del niño (la escuela), y desarrollado a través de las rutinas escolares.
